domingo, 2 de julio de 2017

[CRÓNICA] Alemania reafirma su reinado

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Alemania campeona de la Copa Confederaciones 2017 (Foto: Twitter @DFB_Team_ES)

La ciudad de San Petersburgo se preparaba para la final de la Copa Confederaciones 2017 entre Chile y Alemania, las dos selecciones justamente merecedoras de disputar tal instancia. Bastaron solo 90 minutos y un gol para que los germanos se impusieran ante chilenos. Por un lado una selección sudamericana de rápida movilidad y asociación en espacios reducidos, intensa y alta presión, ya acostumbrados a ganar y de jugarle cara a cara a cualquier rival. Por el otro, la Alemania de siempre pero con nuevos nombres, mismo estilo, misma convicción, sin tener talento individual que sugiera mayor admiración de lo normal pero con una inteligencia colectiva envidiable. 

Chile tomaría las riendas del partido durante los primeros minutos. La presión muy alta descolocó  a los alemanes, en varios pasajes exigidos por la ofensiva chilena liderada por Arturo Vidal. Ya para los 20 minutos era muy evidente la superioridad 'mapocha' reflejada en la impetuosa manera de recuperar el balón. Alemania, sin embargo, fiel a su estilo, en toda esta Copa demostraron que defender y 'aguantar' no es una fastidio cuando se juega a un fútbol completo, se trabaja desde la paciencia y la inteligencia para aprender de la propuesta del rival y atacar en los momentos justos. Y así fue. Un garrafal error de Marcelo Díaz permitió que Timo Wegner dejara completamente solo a Lars Stindl y convertir el único tanto del partido. 

Chile se vio anímicamente golpeado pero aún mantenían la convicción en ataque que los caracteriza. Ya para la segunda etapa, Alemania pondría un bloque en la defensa para contener la intensa movilidad de los sudamericanos, y empezó a insinuarse a través de contragolpes que eran detenidos por los zagueros Gonzalo Jara y Gary Medel, de gigantes actuaciones. Al no poder penetrar el muro alemán, Chile optó por remates de larga distancia y generó peligro desde los pies de Arturo Vidal y Alexis Sánchez que fueron detenidos por el arquero del Barcelona Marc Ter Stegen. 

Finalmente, el árbtitro serbio Milorad Mazic pitaría el final del encuentro y Alemania nuevamente se consagraía en lo más alto demostrando no solo la practicidad del fútbol alemán, sino también la la consagración de un proyecto serio y estructurado trabajado desde la formación que recién 8 años después (2014) pudo dar sus primeros frutos, que ho y se da el lujo de darle descanso a los jugadores titulares y de tener una seleccíon sub-21 campeona del mundo igualmente competitiva. La importancia de respetar un proyecto desde la paciencia. Desde que Joachim Low asumió en 2006 Alemania logró 102 partidos ganados y solo encajó 23 derrotas.  
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